sábado, 23 de junio de 2012

Messi cumple 25 años y sigue siendo el rey




Lionel Messi cumple 25 años llenos de títulos y glorias deportivas. Desde que debutara con el Barcelona ante el Oporto en un amistoso, el peuqeño crack argentino no ha dejado de levantar trofeos con el club catalán.
Ya acumula 21 títulos oficiales. 19 con el Barcelona, uno club en su vida, del que declaró que jamás querría irse; y 2 con la selección Argentina. El último se dio en la final de la Copa del Rey, contra el Bilbao de Bielsa, anotando un gol. Todo un mensaje para aquellos que aún lo discuten o lo quieren comparar. Sencillamente, un arrasador mejor del mundo.
Sus trofeos se agrupan en:
Cinco ligas Españolas (2004/2005, 2005/2006, 2008/2009, 2009/2010 y 2010/2011).
Cinco Supercopas de España (2005, 2006, 2009, 2010 y 2011).
Dos Copas del Rey (2009 y 2012).
Tres Champions League (2006, 2009 y 2011).
Dos Supercopas de Europa (2009 y 2011).
Dos Mundiales de Clubes (2009 y 2011).
Un Mundial Sub 20 en 2005.
Juegos Olímpicos de Beijing 2008.

50 goles le hacen 'Pichichi'

El delantero argentino logró el trofeo 'Pichichi' que le acredita como máximo goleador de la temporada pese a no marcar en el último partido de la temporada para su equipo ante el Real Betis, logrando el increíble registro de 50 goles, algo que no había logrado nunca antes ningún jugador en la historia de la Liga BBVA.

Marcó cinco goles en un partido

El azulgrana completó uno de los partidos más memorables de su carreraal marcar por primera vez cinco goles en un encuentro, el de octavos de final de la Liga de Campeones ante el Bayer Leverkusen en el Camp Nou (7-1), cifra récord en la competición.
El delantero argentino ha añadido un nuevo récord a los muchos que ya ostenta con un partido asombroso en la definición, que le convierte en el primer jugador que marca cinco goles en la Liga de Campeones desde que se juega en el formato moderno.
El argentino ya había anotado en dos anteriores ocasiones cuatro goles, ante el Arsenal y contra el Valencia, y 14 tripletes, pero nunca había alcanzado la 'manita'.